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Tu cuerpo se mueve y realiza procesos vitales gracias a la energía que tienes en cada momento, esta energía se obtiene de varias fuentes, obtienes energía de los alimentos que comes, dependiendo del tipo de alimentos tendrás más o menos energía, también depende de tu actividad física, pero esta energía es perecedera. En cambio en nuestro cuerpo tenemos otro tipo de energía que solo la puedes obtener del universo o de la tierra, esta es la energía vital o energía “Chi”.
Desde tiempos inmemoriales el hombre ha sabido de su existencia y en infinidad de casos se ha beneficiado de ella, aunque también hay muchas personas que son reacias ha creer en ella, aunque ello no haga q ue esta desaparezca y no siga estando ahí a su disposición.
A través de la meditación se puede entrar en contacto con la fuente de suministro de esta energía “Chi” que es infinita y para nada caduca.
Dedicando algunas de tus sesiones a este fin con visualizaciones en las que te ves tomando esa energía de la tierras a través de tus pies, (la toma de energía la realizas mediante el punto “Yonchuan”, situado la planta del pie) o ya sea visualizando que por tu chakra corona, entra un haz de luz blanca y resplandeciente, una luz que invade todo tu cuerpo hasta llenarlo de energía “Chi” y hasta que esta sale por todos los poros de tu piel y se expande por todas partes.
Después de no muchas sesiones notaras que tu animo va cambiado, tu energía no se acaba con el día y que después de un largo día de trabajo sigues estando en forma y con fuerzas para seguir afrontando nuevos retos y superarlos.
La energía ni se crea ni se destruye, solamente se transforma, y mediante la meditación y la relajación obtendrás una fuente inagotable de esta energía vital “Chi”, que en definitiva es lo que mueve el motor de tu cuerpo y que te da la capacidad de realizar todo tipo de tareas en tu vida.
Desde tiempos inmemoriales el hombre ha sabido de su existencia y en infinidad de casos se ha beneficiado de ella, aunque también hay muchas personas que son reacias ha creer en ella, aunque ello no haga q ue esta desaparezca y no siga estando ahí a su disposición.
A través de la meditación se puede entrar en contacto con la fuente de suministro de esta energía “Chi” que es infinita y para nada caduca.
Dedicando algunas de tus sesiones a este fin con visualizaciones en las que te ves tomando esa energía de la tierras a través de tus pies, (la toma de energía la realizas mediante el punto “Yonchuan”, situado la planta del pie) o ya sea visualizando que por tu chakra corona, entra un haz de luz blanca y resplandeciente, una luz que invade todo tu cuerpo hasta llenarlo de energía “Chi” y hasta que esta sale por todos los poros de tu piel y se expande por todas partes.
Después de no muchas sesiones notaras que tu animo va cambiado, tu energía no se acaba con el día y que después de un largo día de trabajo sigues estando en forma y con fuerzas para seguir afrontando nuevos retos y superarlos.
La energía ni se crea ni se destruye, solamente se transforma, y mediante la meditación y la relajación obtendrás una fuente inagotable de esta energía vital “Chi”, que en definitiva es lo que mueve el motor de tu cuerpo y que te da la capacidad de realizar todo tipo de tareas en tu vida.
Manual: Reemplazar las creencias limitantes por creencias que nos lleven al logro de nuestras metas...
